Alemanes e italianos quieren culminar una temporada inolvidable en Dublín. A partir de las 16 horas por ESPN.
La actualidad del fútbol europeo vive un momento de máxima expectación. Este año, la final de la Europa League tiene como protagonistas a dos equipos que, aunque con trayectorias distintas, llegan a Dublín con la ambición de dejar una huella imborrable. Bayer Leverkusen, bajo la dirección del español Xabi Alonso, y Atalanta, dirigido por Gian Piero Gasperini, buscan escribir nuevos capítulos en sus respectivos libros de historia.
Los alemanes llegan a esta instancia tras una racha impresionante. Con 51 partidos invictos, una Bundesliga ganada y el sueño de lograr un triplete en su emblemático aniversario número 120, los rojinegros se plantan en la capital irlandesa como los grandes favoritos. La temporada del equipo ha sido sobresaliente, dominando tanto en la liga doméstica como en las competiciones europeas, consolidándose como una revelación en el fútbol continental. Xabi Alonso, entrenador y estratega, cuenta con todos los efectivos de su plantilla disponibles para este crucial encuentro, lo que incrementa aún más las expectativas sobre su rendimiento en la cancha.
Enfrente estará Atalanta, que disputa su primera final europea. El equipo de Bérgamo ha tenido una temporada para el recuerdo, logrando clasificar nuevamente a la Champions League y peleando hasta el último minuto en la Copa Italia. Con el belga Charles De Ketelaere y el italiano Gianluca Scamacca como jugadores clave, el conjunto italiano buscará romper la racha invicta del Bayer y llevarse a casa su primer título europeo. La victoria sobre Liverpool en los cuartos de final subraya su capacidad de hacer frente a grandes desafíos y alimentar la esperanza de sus seguidores.
El duelo entre estos dos equipos se presenta como un choque de fuerzas y estilos. El Leverkusen, bien afianzado en su estructura táctica, ha mostrado un juego sólido y versátil bajo el mando de Alonso. La capacidad del equipo alemán para adaptarse a diferentes situaciones de juego ha sido uno de los pilares de su éxito esta temporada. El mediocampo, comandado por jugadores de talento y rigor táctico, ha sabido controlar los tiempos y ritmos del partido, permitiendo a sus atacantes desplegar todo su potencial ofensivo.
Por su parte, Atalanta ha destacado por su dinamismo y capacidad de sorpresa. Bajo la dirección de Gasperini, el equipo ha sabido reinventarse y sorprender a sus adversarios con un fútbol atrevido y vertiginoso. La ausencia del neerlandés Marten de Roon, uno de los pilares del equipo, debido a una lesión sufrida en la final de la Copa Italia, plantea un desafío adicional.