Mariana De la Colina, nutricionista experta en alimentación deportiva, nos comparte importantes recomendaciones para aquellos que buscan mejorar su desempeño físico a través de una alimentación adecuada.
Uno de los puntos clave es el desayuno, que debe ser completo y nutritivo para garantizar el suministro de energía necesario tras el ayuno nocturno. Mariana recomienda incluir claras de huevo, que ayudan a la regeneración muscular y son una excelente fuente de proteínas.
Respecto a los carbohidratos, la nutricionista enfatiza que no deben eliminarse, sino seleccionarse cuidadosamente. Se aconsejan granos integrales, legumbres y frutas, destacando la quinoa por su elevado contenido en proteínas y carbohidratos, lo que la convierte en una opción ideal para los deportistas.
Las grasas también son esenciales en una dieta deportiva. Mariana sugiere optar por fuentes saludables como los frutos secos, el aceite de oliva en crudo y los pescados. Un equilibrio adecuado de estas grasas contribuye a una mejor salud física y energía.
No se puede ignorar la importancia de los micronutrientes —vitaminas y minerales— que se pueden obtener fácilmente a través de frutas y vegetales. Por ello, la nutricionista recomienda seguir la regla del «5 al día»: consumir al menos dos platos de vegetales de distintos colores en el almuerzo y la cena, además de tres porciones de fruta al día.
Para mantener la energía y el rendimiento, Mariana aconseja realizar al menos cuatro comidas importantes a lo largo del día: desayuno, almuerzo, merienda y cena. También sugiere hacer colaciones a media mañana y media tarde para evitar llegar a la cena con excesiva hambre, lo cual ayuda a evitar el consumo de calorías innecesarias.
Finalmente, la nutricionista reiteró la importancia del desayuno como el momento más relevante del día para nutrir el organismo después de varias horas sin comida. Mariana aclara que, aunque puede considerarse omitir la cena si se realiza una colación adecuada, es fundamental cumplir con una alimentación balanceada para mantener un buen estado físico y mental.
En conclusión, la combinación de actividad física regular con una alimentación consciente y equilibrada es clave para optimizar el rendimiento y la recuperación de cualquier deportista.