Inés Brizuela y Doria, ex intendenta, abordó temas cruciales para la provincia de La Rioja y el futuro del partido. Entre sus declaraciones, enfatizó la importancia del diálogo con el PRO, destacando las intenciones de seguir construyendo una propuesta política sólida.
Brizuela y Doria no escatimó críticas hacia los recientes movimientos en el Congreso, donde se mostró indignada por la negativa de Javier Milei y de algunos diputados a aumentar las jubilaciones. La dirigente calificó esta postura como una “inmoralidad”, y anunció la apertura de un expediente contra seis diputados que cambiaron su voto en decisiones clave. “La política se ha visto manchada por prácticas que la ciudadanía critica; necesitamos restaurar la confianza”, sostuvo con firmeza.
En cuanto al estado de las relaciones con las distintas fuerzas políticas de la provincia, Brizuela y Doria subrayó que, si bien existe apertura para dialogar con el PRO y una línea de acercamiento con Julio Sahad, su comunicación con la concejala Luciana de León se ha vuelto escasa y no hay ningún contacto con La Libertad Avanza. “No tengo diálogo político con ese sector, aunque mantengo buenas relaciones personales”, aclaró.
Respecto al gobierno provincial, la dirigente radical expresó su preocupación por la falta de un plan integral que aborde problemas como la salud, la justicia y la seguridad. “No hay un enfoque estratégico, solo proyectos de poder. Necesitamos un plan que beneficie a los ciudadanos”, enfatizó, refiriéndose específicamente a la gestión de Ricardo Quintela, que ella considera ha “empobrecido” a los riojanos durante las últimas cuatro décadas.
Brizuela y Doria cerró su intervención reafirmando su compromiso con la construcción de alianzas que busquen el bienestar de los ciudadanos, e hizo un llamado a la acción por parte de los líderes políticos de la provincia. “Es momento de dejar de lado las divisiones y trabajar juntos por un futuro que mejore la calidad de vida de todos los riojanos”, concluyó.
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