Con el 16,01% de las actas computadas, la dirigente del Partido Libre obtenía el 53,44% de los votos, seguida por Nasry Afura, que sacó el 34,01%. Así se pone fin a 12 años de gobiernos del Partido Nacional, cuestionado por corrupción y vínculos con el narcotráfico.
La opositora de izquierda Xiomara Castro se imponía en las elecciones presidenciales del domingo en Honduras con 53,44% de los votos cuando se había computado 16,01% de las actas, indicó en la noche del domingo el Consejo Nacional Electoral (CNE) en su primer informe de resultados preliminares.
En segundo lugar se ubicaba el conservador oficialista Nasry Asfura, con 34,01% y la participación era de 62% del padrón, considerada “histórica” por el presidente del CNE, Kelvin Aguirre, según la transmisión en vivo de la televisora hondureña GoTV.
Los hondureños eligieron al sucesor del presidente Juan Orlando Hernández en elecciones que se desarrollaron en general con tranquilidad, pero que se vieron empañadas tras el cierre de las urnas, cuando tanto el partido de Castro como el de Asfura se proclamaron ganadores antes de que se difundieran los resultados.
«Hemos ganado las elecciones, tenemos presidenta», anunció el partido de izquierda Libertad y Refundación (Libre), de Castro, y «ganamos, tenemos presidente», dijo el Partido Nacional (PN), de Asfura, en ambos casos en Twitter.
Esos anuncios generaron la reacción del Consejo Nacional Electoral (CNE) y la Organización de Estados Americanos (OEA), que desplegó una misión de observadores para el proceso electoral.
«Ayudémonos todos a salir bien de este proceso electoral, el pueblo merece actuar con tranquilidad y prudencia hasta que se produzca el resultado final», reclamó la consejera del CNE Rixi Moncada al anunciar el comienzo del escrutinio, según la agencia de noticias Sputnik.
Asimismo, la misión de la OEA exhortó «a los candidatos y actores políticos a que tengan una actitud responsable y eviten proclamaciones y pronunciamientos anticipados», en un comunicado divulgado en Twitter y otras redes sociales.
Castro era la única entre 13 aspirantes opositores a la que los sondeos daban posibilidades de vencer a Asfura y desplazar de ese modo al PN tras 12 años en el poder y cuestionado por corrupción y nexos con el narcotráfico.
Cerca de 5,2 millones de ciudadanos estuvieron habilitados para votar.
Castro votó el domingo a la mañana en la ciudad de Catacamas, en el departamento oriental Olancho, y exhortó a a sufragar de forma masiva.
“Asistamos a las urnas masivamente temprano para poder ejercer el derecho que tenemos como ciudadanos del voto para hacer un cambio en nuestro país; tengamos paz, no atendamos provocaciones, sabemos que van a intentar provocar al pueblo, hay desesperación, especialmente de aquellos que han estado gobernando estos 12 años”, expresó, según la agencia AFP.
Asfura, quien fue acusado en 2020 de malversar fondos públicos, nombrado en los Pandora Papers y vinculado al tráfico de influencias en Costa Rica, votó en Tegucigalpa y destacó la participación popular.
“Lo que el pueblo hondureño quiere al final es el respeto; todo lo van a decir las urnas, esperemos; según los resultados, veremos la reacción de todo candidato; paz, tranquilidad, sosiego, para darle a Honduras lo mejor”, afirmó.