La ecóloga Sandra Díaz fue distinguida, junto a al investigador brasilero-estadounidense Eduardo Brondízio, por sus estudios sobre el entrelazamiento entre los seres humanos y la naturaleza. Se trata de los primeros sudamericanos en obtener el prestigioso galardón.
Sandra Díaz, investigadora del CONICET en el Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (IMBIV, CONICET-UNC) fue reconocida, junto con el investigador brasilero-estadounidense Eduardo Brondízio, con el Tyler Prize 2025 por sus estudios sobre el entrelazamiento entre la biodiversidad y los seres humanos. El Premio Tyler, comúnmente conocido como “el Premio Nobel del Medio Ambiente”, es considerado una de las distinciones ambientales anuales más prestigiosas del mundo, y Díaz y Brondizio son los primeros sudamericanos en recibirlo.
El Comité Ejecutivo del Premio Tyler resolvió otorgar el premio de 250 mil dólares a Díaz y a Brondízio, por su compromiso con el abordaje de la pérdida de biodiversidad y su impacto en las sociedades humanas. “El trabajo de Sandra Díaz ha sido fundamental para redefinir cómo se conceptualiza y valora la biodiversidad en el mundo,” afirmó Julia Marton-Lefèvre, presidente del Comité. Tanto Díaz como Brondízio buscan llamar la atención sobre el entrelazamiento de la humanidad con la naturaleza, y a reconocer las responsabilidades compartidas en la trama de la vida’. “La justicia socio-ambiental y el respeto por nuestras conexiones con otras formas de vida en la Tierra deben dejar de ser conceptos abstractos”, afirmaron ambos ganadores en un comunicado conjunto.
Fuente Conicet