El Lic. Adrián Saéz nos comenta en la columna del dia de hoy: La Escucha Activa
Para mantener relaciones saludables con los demás, basadas en empatía y respeto, saber mantener una escucha activa es fundamental. Podríamos definir entonces, a la escucha activa, como una habilidad comunicativa fundamental si lo que buscamos es establecer relaciones saludables y respetuosas con los demás.
¿Qué beneficios puedo obtener al desarrollar una escucha activa en mis relaciones? ¿Cómo desarrollar una escucha activa?
La Escucha Activa implica el compromiso físico y mental de querer captar con atención la totalidad del mensaje que otra persona emite, con el objetivo de interpretar el significado correcto del mismo, a través de la comunicación verbal y no verbal que realiza. Para ello se utiliza la retroalimentación y el chequeo, de manera de verificar lo que se ha entendido.
Cuando se realiza una buena escucha activa, se tiene que estar atento y dispuesto a percibir con la mayor claridad lo siguiente:
1. Qué se observa en la otra persona a quien se escucha.
2. Qué se cree que la otra persona siente en ese momento.
3. Qué se cree que la otra persona necesita.
4. Qué peticiones explícitas se realiza a la persona con quien se interactúa.
Para que el escuchar ocurra se necesita:
*En el respeto mutuo, en aceptar que los otros son diferentes a nosotros y que en esa diferencia son legítimos.
*En la humildad de reconocer que no vemos/escuchamos lo que está allá afuera, sino lo que nuestra biología/observador nos permite.
*En la empatía, la capacidad de ponernos en el lugar del otro y escuchar desde donde él está hablando (su historia, sus experiencias, sus expectativas).