La locura por los carpinchos en las redes no es nueva, pero su reaparición en Nordelta reavivó la llama memética en el país.
Argentina no es el único país que ama a estos roedores gigantes sino que llegaron a convertirse en unas de las mascotas elegidas por Disney para su aparición en la próxima película animada Encanto. El musical, cuyo escenario será Colombia, cuenta con una troupe de animales autóctonos que acompañarán a los principales protagonistas.
Encanto es una de las pruebas que Disney comenzó a conectar cada vez más con las tradiciones de América Latina, así como lo hizo con Coco con Centroamérica. Los realizadores y animadores fueron de viaje de investigación a la región para el desarrollo inicial de la película y quedaron asombrados por la flora y fauna típica de Colombia, entre ellos, los tucanes, coatíes, buganvilias y por supuesto carpinchos (o chigüiros, como se los llama allí).
Los responsables de la creación de los paisajes sonoros y las canciones son el cantante Juan Carlos Coronel y el compositor será Lin-Manuel Miranda, el famoso autor del fenómeno de Broadway Hamilton.
El carpincho siempre estuvo cerca
Los chigüiros son parte natural del ecosistema latinoamericano desde hace siglos. Existen historias que cuentan cómo los nativos de las regiones solían cazarlos como una de sus principales fuentes de alimento, y cómo su nutrición se basaba alrededor de una dieta con un gran consumo de su carne como fuente de proteína. Actualmente son Patrimonio Natural de toda Latinoamérica, ya que se lo encuentra desde Panamá hasta el sur de la provincia de Buenos Aires (Argentina).
En Argentina, una resolución publicada en 1979 por la Dirección de Recursos Naturales prohibió la caza del Gato Montés, el desplume del Avestruz o Ñandú y la caza del Carpincho. El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible aseguró que el avance de la urbanización sobre los humedales, como ocurre en el caso de Nordelta, en el municipio bonaerense de Tigre, afectó a la fauna nativa de manera directa y que, como consecuencia de esa situación, especies como el carpincho «han quedado excluidos de su ecosistema».
