La reconocida institución económica publicó un panorama poco alentador para lo que resta del año en nuestro país. A continuación los números.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha emitido un sombrío pronóstico que destaca una perspectiva negativa para la economía argentina en el año actual. Según sus análisis, se espera una contracción del 3,3% en la actividad económica, lo que representa un aumento en la recesión en comparación con las estimaciones anteriores. Además, se proyecta una disminución en la tasa de inflación, con una variación anual del 208,1%.
Este nuevo informe refleja una mayor profundización en la contracción económica en comparación con pronósticos previos, mientras que muestra una mejora en las expectativas de inflación. Se estima que el Producto Interno Bruto (PIB) se reducirá en un 3,3% durante el año en curso, antes de registrar un modesto crecimiento del 2,7% en 2025. La contracción económica del año pasado fue del 1,6%.
Se destaca que, a pesar de una sólida recuperación en la producción agrícola, varios sectores como la industria, la construcción y los servicios públicos han sido gravemente afectados por ajustes fiscales y la erosión de los ingresos reales.
En cuanto a la inflación, se observa una desaceleración en el aumento de los precios, con una tasa anual que alcanzó el 288% en marzo. Sin embargo, se espera una moderación en los cambios mensuales de precios. La OCDE proyecta una disminución en la inflación para los próximos años, con estimaciones del 208,1% para este año y del 71,2% para 2025. Se señala que los precios regulados aumentaron rápidamente a principios de 2024, pero se han aliviado los controles de precios para corregir distorsiones.
La organización advierte que el panorama económico seguirá afectando la actividad durante gran parte del año, con una disminución en los ingresos reales que impactará en el consumo privado y la inversión. Se espera que la recuperación de la demanda interna sea impulsada eventualmente por el levantamiento gradual de restricciones a las importaciones y controles cambiarios. Sin embargo, se subraya la importancia de una política fiscal más estricta y una implementación más ágil de reformas estructurales para sostener la recuperación económica.
A pesar de las mejoras proyectadas, la OCDE destaca que persisten riesgos significativos para la economía argentina, incluyendo reservas extranjeras bajas, restricciones cambiarias y alta inflación. Se insta a intensificar las reformas estructurales y a implementar medidas fiscales adicionales para mejorar la estabilidad macroeconómica de manera sostenible.