El Museo de la UNLaR de la Rioja anunció su reapertura oficial, invitando a niños, estudiantes, científicos y turistas a descubrir el vasto recorrido de la historia humana y la evolución de nuestro planeta. Aunque sus instalaciones nunca cerraron formalmente, durante el período de acondicionamiento se realizaron mejoras estructurales para ofrecer una experiencia más enriquecedora, explicó Pablo Salvadeo, su director.
El museo funciona de lunes a viernes, en horario corrido desde las 9 de la mañana hasta las 21 horas, y actualmente cuenta con un equipo de guías especializados, integrantes del programa «Anfitriones», quienes acompañan a los visitantes en cada recorrido. La diversidad de salas y áreas está diseñada para públicos de todas las edades, incluyendo una sala especialmente pensada para los más pequeños, y espacios orientados al público científico.
El recorrido comienza en la sala de paleontología, donde se exhiben restos petrificados y evidencia de la historia geológica de la Tierra, remontándose a millones de años atrás. Aquí, los visitantes pueden entender los cambios geológicos que han moldeado el continente y observar fósiles de gran valor, incluyendo registros de extinciones masivas, como la que culminó con la desaparición de los dinosaurios hace aproximadamente 66 millones de años.
Uno de los puntos destacados del museo es la exhibición que relata la odisea de la especie humana. Desde su origen en África, hace unos 4 millones de años, hasta su expansión a través del continente americano, cruzando el estrecho de Bering. La exposición explica cómo los primeros habitantes llegaron a la región y cómo evolucionaron tecnológicamente, desde el manejo de herramientas de piedra hasta el desarrollo de la cerámica, la domesticación de animales y el cultivo de plantas, marcando etapas clave en la historia prehispánica.
Asimismo, el itinerario permite a los visitantes explorar la historia de la región a través de hallazgos arqueológicos en el área del Talampaya y sus valles circundantes. Estos vestigios reflejan la ocupación humana durante los últimos 2.000 a 3.000 años.
La sección de paleontología también destaca por su impacto en la comprensión de la vida en la Tierra en diferentes épocas. Se muestran procesos de petrificación y se explica cómo las rocas contienen registros de eventos de extinción masiva, incluyendo la de los dinosaurios y otras especies anteriores en la historia geológica del planeta. La diversidad de fósiles en la región muestra cómo la vida se recuperó y resurgió después de cada catástrofe, especialmente en períodos como el Paleozoico y el Mesozoico.
El director del museo, Pablo Salvadeo, destacó que esta reapertura busca ofrecer una experiencia didáctica y científica, promoviendo el interés por el patrimonio natural y cultural de la región. Además, resaltó que el museo continúa siendo un espacio de aprendizaje y conservación para toda la comunidad.
Para quienes deseen visitar, el museo se encuentra en el predio de la universidad, con acceso desde el frente y entrada libre y gratuita. La invitación queda abierta para que grandes y chicos puedan adentrarse en la historia de la Tierra y de la humanidad, en un recorrido que combina ciencia, historia y cultura en un solo lugar.