La implementación de esta tecnología ha causado polémica por lo que podría ser una amenaza para la privacidad de los menores
Las Inteligencias Artificiales (IA) cada día se ven más inmersas en la realidad y cotidianidad de las personas, teniendo en cuenta la importancia de las mismas para la realización de tareas diarias como la conducción de un auto o la reproducción de música con ayuda de un asistente virtual.
Sin embargo, en muchas ocasiones dicha tecnología se convierte en tema de polémica cuando se vuelve invasiva, especialmente en medio de un ambiente en el que niños y adolescentes son los protagonistas; por ejemplo una escuela.
Así lo demuestra un caso en Reino Unido, en donde al menos nueve escuelas de North Ayrshire implementarán un sistema de pago en el que los estudiantes comprarán sus almuerzos por medio del reconocimiento facial. La información fue dada por The Financial Times, añadiendo que el objetivo primario de esta idea no es solamente reducir el contacto en medio de la pandemia por la covid-19 y la reactivación económica que vive ese país, sino reducir al máximo los tiempos de compra y venta de los alimentos en las cafeterías escolares.
¿Y la privacidad?
Sin embargo, aunque esta IA podría ser beneficiosa para los tiempos dentro de la hora de almuerzo de los estudiantes, lo cierto es que muchas personas no dudan en que también podría ser un arma de doble filo en el que los menores podrían ver afectada su privacidad ante el mundo.
Cabe recordar que este tipo de tecnologías almacenan una gran cantidad de información detallada de una persona, empezando por los rasgos más importantes de su rostro lo que podría significar un peligro para el futuro de los niños y de su identidad.
Ante estas críticas, CRB Cunningham, empresa encargada de la tecnología de reconocimiento facial que se va a utilizar, aseguró que a diferencia del sistema usado en las calles de Europa su proyecto no cuenta con un hardware de ‘reconocimiento facial en vivo’ por lo que no tomarán información más allá de la que los niños y padres autoricen a usar.
“Los datos de reconocimiento facial se cifran mediante AES 256 y se almacenan en un servidor escolar dentro de la red escolar segura o se alojan en un servidor seguro Azure por CRB Cunninghams. Los operadores de POS pueden identificar de manera rápida y segura la cuenta sin efectivo del alumno”, indicó la empresa.
Asimismo, la compañía recordó que este software cuenta con el mismo proceso de recolección de información biométrico que usan casi todos los centros de educación superior en el mundo y que funciona con la huella dactilar de sus estudiantes. En dichos casos la información no se almacena en una nube, sino que se encuentra segura en los servidores internos de las instituciones para garantizar que su uso sea 100 % privado y con fines de ingreso o salida del claustro educativo.
“Con el reconocimiento facial, los alumnos simplemente seleccionan su comida, miran a la cámara y se van, acelerando el servicio de la hora del almuerzo mientras eliminan cualquier contacto en el punto de venta (…) Este método de identificación verdaderamente sin contacto significa que los equipos de catering pueden aumentar de manera segura su velocidad de servicio al simplificar el proceso de pago para los estudiantes que ya no necesitan llevar ningún tipo de identificación, como una tarjeta o incluso ingresar un PIN”, añade la información.
Con todo esto, los críticos de esta iniciativa como Big Brother Watch y el Comisionado de Biometría de Inglaterra aseguraron que no deja de ser un tema de preocupación teniendo en cuenta que aunque no sea una tecnología 100 % invasiva, el verdadero peligro es que los niños se acostumbren a la misma y que en un futuro puedan ver una implementación mucho más invasiva como algo normal.
Fuente: http://www.infobae.com