En el marco de un ferviente debate en la ciudad sobre la obligatoriedad de la propina en el sector gastronómico, hemos querido profundizar en las opiniones de trabajadores y clientes, así como en las propuestas que se están discutiendo a nivel nacional.
Luis Cuello, titular de UTHGRA, la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina, ha planteado la necesidad de que la propina sea considerada como un pago obligatorio en los comercios de gastronomía. En declaraciones previas, Cuello sugirió que «se establezca un porcentaje determinado sobre el consumo, como un 10% que los clientes dejen en forma obligatoria», algo que ha tenido eco entre ciertos sectores del rubro.
La propuesta ha cobrado más relevancia tras las declaraciones del nuevo ministro del gobierno de Javier Milei, quien ha sugerido que la propina debería pagarse a través de medios digitales. Este cambio podría simplificar el proceso, pero también ha generado diversas opiniones entre los trabajadores de la industria.
Durante nuestra cobertura, conversamos con José, un empleado de la cafetería Guten Tag, quien expresó su apoyo a la obligatoriedad de la propina. «Yo creo que sí, debería ser obligatoria. A veces hay gente que entra solo a tomar un cortadito y se va. Pero la propina es muy importante, especialmente cuando es compartida entre el personal», comentó José.
Reconoció que propinas como la que recibió una familia brasileña de 10.000 pesos son una gran ayuda y motivación. «Nos ayuda a salir adelante, sobre todo en este contexto. Así que claro, que vengan más brasileros a consumir», añadió.
La discusión sobre el porcentaje de propina también surgió en la conversación. Muchos coinciden en que un 10% parece ser lo habitual. José mencionó que «depende del tipo de servicio y la mesa también; si son muchas personas, es justo que se aplique una comisión», sugiriendo que algunas cafeterías implementan comisiones de ventas que benefician al personal.
En cuanto a la forma de recibir propinas, José indicó que, aunque algunas personas prefieren dejar efectivo, también hay clientes que solicitan dejar propina a través de transferencias. «A veces, si no tienen efectivo, nos piden nuestro alias», declaró.
La propuesta del ministro de que las propinas se gestionen digitalmente ha sido recibida con opiniones diversas. Algunos trabajadores consideran que esto podría mejorar la transparencia en el manejo de las propinas, mientras que otros temen que la falta de contacto humano al dejar propinas pueda disminuir la generosidad de los clientes.
Mirá la nota completa aquí: