El emotivo acto tuvo lugar en la plaza Sembradores de Esperanza de la Ciudad Universitaria, donde se evocó el 46° aniversario del Golpe de Estado Cívico-Militar en Argentina. En la oportunidad también se rindió homenaje a los trabajadores universitarios desaparecidos: César Antonio Minué y Adán Roberto Díaz Romero, y se reafirmó el compromiso con los derechos humanos.
La ceremonia se llevó a cabo en la tarde del miércoles en el ingreso principal de la Casa de Altos Estudios, y estuvo encabezada por el rector y vicerrectora, Daniel Quiroga y María Corzo, respectivamente. Además, contó con la presencia del Director General de Promoción de Derechos Humanos de la provincia, Marcelo Acosta; miembros de la Asociación de Ex Presos Políticos; y demás autoridades universitarias.
En su discurso, el rector expresó que recordar esta fecha “es muy importante” y que “debemos evocarla de manera permanente porque se trata del hecho más oscuro y trágico de toda la historia moderna de nuestro país”.
En la misma línea, hizo alusión a los dos trabajadores universitarios desaparecidos. Se trata de Cesar Antonio Minué, quien se desempeñaba en el área estudiantil de la entonces Universidad Provincial de La Rioja y del antropólogo Adán Roberto Díaz Romero quien también trabajaba en la misma universidad como investigador. En ese sentido, Quiroga indicó que en el rectorado de la UNLaR se conservan dos cuadros con sus fotos con el propósito de “traerlos a la memoria permanentemente”.
Asimismo, la máxima autoridad académica consideró que este día es un momento oportuno “para reflexionar y para reafirmar nuestras luchas por los derechos humanos y por los valores de la vida democrática”.
Por su parte, la vicerrectora saludó a familiares de sobrevivientes y de la Asociación de Ex Presos Políticos; y los felicitó por mantener anualmente los actos conmemorativos en honor a quienes desaparecieron y sobrevivieron al golpe de Estado.
Además, sostuvo que «como representantes de la universidad y como formadores, es nuestra obligación y responsabilidad no permitir que esto caiga en el olvido y muchos menos que vuelva a suceder». Luego indicó que es una responsabilidad institucional «generar las condiciones necesarias para que las y los estudiantes valoren, conozcan la historia y aprendan a vivir en democracia».
A su turno, la docente y ex presa política, Alicia Parodi, destacó el hecho de que, a pesar de que pasen los años, las diferentes organizaciones de derechos humanos organicen citas para cada 24 de marzo y que se continúe buscando a hijos, hijas, nietos y nietas que todavía no aparecieron. Seguidamente, como sobreviviente, contó las vivencias que atravesó en esa época y manifestó: “Nos doblaron pero no nos quebraron, nos seguimos levantando y luchando por un nuevo amanecer”.
En tanto que Acosta, en representación de la Secretaría de Derechos Humanos, mencionó en su alocución el vigésimo aniversario de la sanción de la ley N° 25.633 que establece esta fecha como el Día Nacional de la Memoria, por la Verdad y la Justicia. «Es una ley que nos dice que no debemos permitir nunca más que tenga lugar el terrorismo de Estado en nuestro país» expresó; y solicitó que la universidad siga acompañando las luchas que se dan contra los flagelos que aún se viven en democracia.
Posteriormente, sobre el cierre del acto, el profesor Raúl Millicay interpretó dos canciones alusivas a la fecha: “Como la Cigarra” de María Elena Walsh y “Todo Cambia” de Julio Numhauser Navarro.