El joven Connor Sturgeon, de 25 años, ingresó con un rifle al banco Old National ubicado en Louisville -Kentucky-. Dejó heridas al menos a ocho personas y él también falleció durante el tiroteo.
Connor Sturgeon, de 25 años, mató a cuatro personas este lunes 10 de abril al protagonizar un tiroteo en Louisville, Kentucky, en el centro este de Estados Unidos. El joven ingresó al banco Old National, de donde había sido despedido, y mientras transmitía en vivo disparó a los presentes.
El tirador murió poco después, aún no está claro si fue abatido por los agentes de policía o se disparó a sí mismo, dijo Paul Humphrey, un oficial de la policía local, en conferencia de prensa.
«Cinco personas han muerto en total. Al menos seis personas más han sido transportadas al hospital” informó la policía de Louisville en Twitter, incluyendo al autor de los disparos entre los fallecidos.
La policía llegó en unos minutos al lugar tras haber recibido varias llamadas en torno a las 8:30 hora local, por disparos en las instalaciones del Old National Bank, en el centro de la ciudad. Cuando los oficiales llegaron al lugar, el sospechoso «todavía estaba disparando», dijo Humphrey, según consignó AFP.
«Creemos que actuó solo y tenía un vínculo con el banco», agregó el oficial sobre lo sucedido.
En su cuenta de Instagram, donde transmitió en vivo la masacre, había compartido varios memes con frases alusivas al hecho. Uno de ellos decía: “Se lo que tengo que hacer pero no sé si tengo la fuerza para hacerlo”, mientras que otro señalaba: “No van a oír palabras o protestas. Veamos si escuchan esto”.
De acuerdo a la información que trascendió, Sturgeon le habría enviado un mensaje a un amigo advirtiéndole que dispararía en el banco. La policía también confirmó que había compartido imágenes en vivo en el momento del hecho, y ese video fue dado de baja por las autoridades.
Los fallecidos fueron identificados como Joshua Barrick, 40; Thomas Elliott, 63; Juliana Farmer, 45; and James Tutt, 64.
«Al menos dos agentes resultaron heridos en el tiroteo y uno de ellos está siendo operado en el hospital”, dijo Paul Humphrey.
Otras ocho, dijo, están siendo atendidas en el hospital, mientras que dos de los heridos se encuentran en estado crítico, incluido uno de los policías.
Los agentes «sin duda salvaron vidas», estimó el alcalde Craig Greenberg en rueda de prensa en la que denunció «un nuevo episodio de violencia armada». Él mismo sobrevivió a un tiroteo el año pasado.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, afirmó a los periodistas que ha perdido a un «amigo muy querido» en el tiroteo, «y otro amigo cercano es uno de los que están en el hospital», dijo durante la conferencia de prensa.
Fuente PERFIL