En contacto con Multimedio UNLaR, Oscar Alpa, vicepresidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y rector de la Universidad Nacional de La Pampa (UNLPam), se pronunció sobre la marcha federal programada para esta tarde, la cual busca visibilizar la situación crítica del sistema universitario argentino. Alpa destacó la importancia de esta movilización en todas las ciudades del país, no solo en la capital, con el objetivo de reclamar una mayor atención y diálogo con el gobierno nacional.
La movilización surge en un contexto donde la comunicación entre el sistema universitario y el gobierno se ha vuelto cada vez más tensa. Alpa denunció que las declaraciones recientes del gobierno tienen como objetivo desprestigiar las instituciones académicas y su impacto en la formación de profesionales esenciales para el país, como médicos, enfermeros e ingenieros. «No entendemos por qué quiere enfrentar al pueblo argentino desprestigiando a las universidades», afirmó.
Alpa también abordó la percepción pública sobre el sistema universitario. Reconoció que muchos en la sociedad pueden dudar de la integridad de las universidades debido a las narrativas que sugieren corrupción o falta de transparencia. Sin embargo, enfatizó: «Este es el problema de este gobierno que, en vez de construir, trata de destruir la confianza». Hizo un llamado a la ciudadanía para que se acerque a cualquier universidad, investigue y consulte la realidad, especialmente en el interior del país, donde muchos de los graduados son quienes ocupan hoy lugares en la política.
La preocupación por el futuro del sistema se intensifica con el anuncio de un potencial veto al presupuesto universitario que podría recortarlo de 0,7% del PIB a 0,4%. Alpa advirtió que si esto se concretara, «la calidad de la educación comenzará a disminuir y se fomentará la idea de arancelar la universidad, generando una carga económica insostenible para los estudiantes». Subrayó que Argentina, a diferencia de países como Chile, no debe caer en un sistema que genera deudas para acceder a la educación superior.
En este sentido, el rector destacó que el sistema universitario argentino no genera déficit fiscal y ha mantenido un gasto por debajo de países desarrollados. «Estamos atentando contra el futuro de la nación, porque realmente no vamos a tener profesionales de calidad», advirtió, sugiriendo que, cuando se perciban las consecuencias de estas decisiones, podría ser demasiado tarde.
Finalmente, sobre los llamados a un «esfuerzo compartido» que han realizado algunas autoridades, Alpa expresó su desacuerdo. «No es un esfuerzo. Lo que está planteando el gobierno es mantener lo que es histórico, sin buscar mejorar o crecer», concluyó. La marcha de esta tarde representa no solo una defensa de la educación pública, sino también un grito colectivo en pro de un sistema que durante años ha permitido el ascenso social y el acceso a oportunidades a miles de argentinos.
