El primer brote comenzó después de que tres niños se comieran un murciélago y murieran en menos de dos días. Por el momento, se registraron 419 casos y 53 fallecimientos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los médicos de la República Democrática del Congo encendieron las alarmas por una enfermedad misteriosa que ya mató a más de 50 personas, horas después de que desarrollaran los primeros síntomas. El brote, que comenzó el 21 de enero en la ciudad congoleña de Boloko, ha registrado hasta el momento 419 casos y 53 fallecimientos, con una rapidez alarmante: la mayoría de los afectados pierden la vida en menos de 48 horas desde la aparición de los síntomas, según informó la oficina de la OMS en África.
Las autoridades sanitarias sospechan que el brote comenzó luego de que tres niños consumieran un murciélago muerto. Posteriormente, desarrollaron fiebre hemorrágica y fallecieron en solo dos días. Al respecto, la enfermedad tiene una tasa de mortalidad del 12,3%, indicó el organismo internacional, que es alrededor de 10 veces más alta que cuando el Covid comenzó a propagarse por primera vez.
«Eso es lo que es realmente preocupante», manifestó Serge Ngalebato, director médico del Hospital Bikoro en la República Democrática del Congo, a la Associated Press, refiriéndose a la rapidez con la que perecieron las víctimas. En ese sentido, la OMS describió el brote como una «amenaza significativa para la salud pública».
Al respecto, los funcionarios de salud advirtieron que la ubicación remota de las epidemias, combinada con la «débil infraestructura de atención médica del país, aumenta el riesgo de una mayor propagación, lo que requiere una intervención inmediata de alto nivel para contener» una transmisión más elevada. Además, señalaron que el número de brotes de enfermedades que pasan de los animales a los humanos (por ejemplo, al comerlos) ha aumentado más del 60% en África en la última década.