La provincia de La Rioja ha sido condenada por un tribunal de Nueva York a pagar USD 39,9 millones a tenedores de bonos tras incumplir obligaciones financieras. Este fallo es resultado de un saldo deudor superior a USD 16 millones que provocó una reestructuración fallida y el incumplimiento de un pago adicional de USD 26 millones en agosto, lo que puso sus números en rojo.
La sentencia, dictada por la jueza Jessica Clarke, desglosa los pagos en USD 25,9 millones a Beauregarde Holdings LLP y USD 12,8 millones a Beauregarde Holdings II LLP, junto con intereses diarios que se acumularán hasta la resolución final. La deuda original, emitida en 2017 para financiar un parque eólico, ascendía a USD 200 millones con un interés inicialmente del 9,75% anual, pero fue reestructurada en 2021 a un interés de 3,5%.
Los bonistas, representados por el bufete Quinn, Emanuel Urquhart y Sullivan, argumentan que el incumplimiento del gobierno de Quintela perjudica directamente a la población, al desalentar la inversión en la provincia. La Rioja es la única provincia de Argentina que no ha cumplido con sus obligaciones internacionales tras la reestructuración de deudas durante 2021.
A la crisis se suman problemas económicos derivados de la alta inflación y la devaluación, que han limitado la capacidad de pago de la provincia. Con pagos programados para 2024 que ascienden a USD 1.955 millones, La Rioja enfrenta un futuro financiero incierto si no se toman medidas inmediatas y eficaces.