El operativo fue desplegado luego de que el Instituto Nacional de Migración (INM) anunciara que verificará la situación de los extranjeros. Se hicieron presentes más de 50 autos policiales, que trasladaban a más de un centenar de agentes.
La tensión reinaba en un campamento de migrantes haitianos en la localidad mexicana de Ciudad Acuña, fronteriza con Texas, Estados Unidos, tras la llegada de decenas de policías mexicanos, en el marco de una polémica decisión del Gobierno de Joe Biden de no permitir el ingreso de los caribeños a su territorio.
El operativo fue desplegado luego de que el Instituto Nacional de Migración (INM) anunciara que verificará la situación de los extranjeros para que retornen a los lugares donde ingresaron sus solicitudes de refugio en México, a fin de darles continuidad, informó la agencia de noticias AFP.
Estos trámites permiten a los migrantes poder permanecer legalmente en México y no ser deportados, a la espera de poder cruzar a Estados Unidos.
Más de 50 autos policiales, que trasladaban a más de un centenar de agentes, llegaron este jueves a las inmediaciones de un parque donde permanecen los migrantes desde hace cerca de una semana.
El convoy se instaló a lo largo de la ribera del río Bravo, por donde cientos de haitianos van y vienen diariamente entre ambos países trasladando alimentos y provisiones.
«Hemos venido para coordinar la atención a esta población que se encuentra en situación de vulnerabilidad. El respeto a estas personas está garantizado«, había dicho horas antes el comisionado nacional del INM, Francisco Garduño, en Ciudad Acuña.
Funcionarios del INM estuvieron presentes en los primeros momentos del despliegue, pero luego se retiraron.
La semana pasada, más de 15.000 inmigrantes -la gran mayoría haitianos- lograron atravesar la frontera y acamparon en la ciudad texana Del Río, lo que provocó que el servicio de vigilancia fronteriza de Texas embistiera contra el masivo flujo de migrantes que buscaban entrar ilegalmente y que el Gobierno estadounidense comenzara a enviar aviones llenos de ciudadanos haitianos de regreso a su país.
Hace meses que se registran flujos migratorios récord en la frontera con México.
Según las últimas cifras oficiales, más de 208.000 migrantes fueron detenidos allí en agosto, lo que lleva a 1.300.000 el número de personas detenidas desde que Biden asumió en la Casa Blanca.
De ese total, unos 596.000 provenían del llamado Triángulo Norte –que integran El Salvador, Guatemala y Honduras- y más de 464.000 de México.
Aunque Biden prometió un planteamiento más humano que su predecesor, el republicano Donald Trump, en materia de inmigración, el veterano demócrata luchó por detener la marea de inmigrantes que atraviesa la frontera desde que asumió el cargo en enero.
Fuente: http://www.telam.com.ar