En una jornada marcada por el misterio y la tensión, la comunidad de Chepes se encuentra conmocionada tras el hallazgo del cuerpo sin vida de una mujer en un complejo escenario que aún genera interrogantes. La víctima, identificada preliminarmente como Elba Ibáñez, fue hallada en una vivienda del barrio El Alto, un sector nuevo y en crecimiento de la ciudad, donde se produjo una trágica circunstancia que aún no ha sido esclarecida de manera oficial.
Según el testimonio del periodista Antonio Carrizo, la investigación está en marcha, pero todo el procedimiento se desarrolla bajo un estricto hermetismo. Desde las primeras horas, las autoridades han resguardado la escena y limitado el acceso a familiares y vecinos, manteniendo en silencio los detalles de la causa de la muerte y las circunstancias exactas que rodean el hecho.
La primera versión que circuló indicaba que la mujer había resultado quemada tras un incendio en la vivienda, siendo trasladada al hospital para su atención. Sin embargo, con el transcurso del día, esta hipótesis comenzó a ser cuestionada ante la presencia de un hombre, presunto pareja de la víctima, que fue llevado custodiado por la policía a un centro de salud. Se desconoce si este hombre es el esposo o una pareja sentimental, y aún no hay confirmación oficial sobre su participación o vínculo con la víctima.
El cuerpo se encontró en medio de un escenario cuidadosamente preservado por los efectivos policiales, que aguardaban la llegada de la policía científica, judicial y un médico forense de la ciudad de Chamical. La identidad de la mujer, todavía no cuenta con una confirmación oficial de su edad, y los familiares no han podido acceder al lugar donde y yacía el cuerpo debido a las restricciones establecidas en el perímetro de seguridad.
Hasta el momento, se sabe que la víctima era una mujer humilde, luchadora, que llegó desde una localidad rural hace varios años y que había logrado obtener un título de profesora de lengua, según relatan sus allegados. Era reconocida por su carácter emprendedor y su esfuerzo por superar las dificultades de la vida en el interior. Sin embargo, poco más se conoce respecto a su entorno familiar, ya que tampoco hay datos claros sobre su pareja o posibles conflictos previos.
Un dato relevante es que, al momento del hecho, habría un hijo de aproximadamente 10 o 11 años, quien aparentemente se encontraba en la escuela cuando ocurrió la tragedia. La comunidad se encuentra en estado de shock, y las redes sociales se han inundado de pedidos de justicia y esclarecimiento de los hechos.
Las investigaciones continúan en secreto, y las autoridades judiciales y policiales aún no han brindado declaraciones oficiales. Se espera que los peritajes, incluyendo la autopsia y otras diligencias forenses, permitan determinar con certeza las causas del fallecimiento.